Momentos que dejan enseñanzas
De todos los momentos que acontecen te pueden ocurrir en la vida, hay uno que todos esperamos que no nos toque, la separación o divorcio de nuestra pareja.
No entraré aquí en cuestiones emocionales, que son un tema aparte, sólo pretendo aportar un mapa de ruta para hacer frente a uno de los aspectos más traumáticos: el de las finanzas familiares compartidas.
Todo lo que había estado en común, bienes, deudas y compromisos va a dejar de estarlo y es de suma importancia hacerlo de forma ordenada para no lamentarse en el futuro.
En caso de divorcio
Y cuáles son los principales aspectos a tener en cuenta:
Para poder continuar con tu vida, necesitas contar con recursos. Cuántos y cuáles vendrá dado por cómo negocies los términos económicos del divorcio. Para hacerlo lo mejor posible te conviene:
1 – No tengas prisa, todos tenemos nuestros momentos
En el calor del enfrentamiento, es muy fácil querer terminar cuanto antes y firmar cualquier cosa. Aunque después no estés de acuerdo, resulta mucho más complicado renegociar que hacerlo bien desde el principio.
Tienes que determinar que es lo importante para ti conseguir o mantener de lo que era compartido. Ningún reparto va a ser «justo». Por diversos motivos siempre hay cosas que le importan más a uno que a otro, y desde ese punto de vista no hay quien equilibre la balanza.
Consejo práctico: En el caso de existir matrimonio con régimen de gananciales (el más común en nuestro país), para no encontrarte bloquead@, puedes proceder de inmediato a realizar un documento notarial de separación de bienes.
Esto significa que a partir de ese momento podéis tomar decisiones económicas de manera independiente.
El reparto de los bienes gananciales se puede hacer cuando os parezca oportuno, sin ningún problema, en cualquier momento posterior.
2 – Busca los apoyos que necesites en los malos momentos
Puede ser que hasta ahora los temas económicos no hayan sido tu fuerte, o incluso que fuera tu pareja la que se encargara de todos los temas. No suele ser el mejor momento para negociar en asuntos monetarios, sobre todo si tienes poca experiencia. Te conviene apoyarte en otras personas que no estén directamente implicadas en lo que se está hablando.
Consejo práctico: Es excelente el recurso a un Servicio de Mediación, en el que se procura no sólo relajar la tensión, sino informar a ambas partes lo mejor posible de sus derechos y obligaciones y llegar a acuerdos compatibles.
En algunos casos un familiar respetado por ambos también puede marcar la diferencia a la hora de alcanzar un buen acuerdo.
3 – Que no quede nada pendiente.
Por largo que sea el proceso y por mucho tiempo que lleve, es imprescindible no dejar asuntos pendientes a medias.
Incluso exparejas que se llevan bien, cambian de ideas con el tiempo, y la vida continúa y nuevas parejas, compromisos y proyectos pueden complicar muchísimo las cosas en el futuro.
Consejo prácticos:
- Que queden canceladas todas las cuentas conjuntas, para que no tener una baja en los momentos de déficit .
- Pactar uno por uno cómo quedan los préstamos, y las posibles deudas con tarjetas y cómo se pagarán. Incluso renegociar con el banco los términos en que quedan las deudas.
- Qué ocurre con la vivienda y el coche, si son o no en propiedad.
Y, si tienes hijos, el capítulo más importante es dejar debidamente cerrado judicialmente todo lo que se refiera a ellos.
Estando de buenas, no hay problema, pero si los vientos cambian, es buena práctica el que todo quede resuelto, negociado y por escrito.
En resumen, a nadie le gusta verse en una situación en la que desaparece un proyecto familiar. No sólo es un golpe emocional, sino también económico.
Las prisas nunca son buenas consejeras, pero en una negociación de divorcio son peores aún. Si te encuentras demasiado alterado o piensas que no sabes lo suficiente para tomar buenas decisiones, busca quien te apoye y asesore para defender tus legítimos intereses.
Recuerda, que si no lo haces así puedes verte demasiado comprometido económicamente a largo plazo y llevarte indeseables sorpresas en el futuro. Para recuperarte también te hará falta estabilidad y saber con qué recursos vas a contar.
Y tú ¿qué opinas? Si te gustó el tema déjame tu comentario.
Sobre el autor de este post:
Mª Angeles González. Tras 30 años de experiencia en el sector financiero, hoy ayuda a los emprendedores a conciliar su economía familiar y de negocios con un método flexible y eficaz, trabajando emociones y dinero.
Mª Angeles (@mag_coaching) es economista y Coach Financiero para Emprendedores en MagCoaching. Su blog personal es magcoaching.es y puedes encontrarla en Linkedln, Google+, Twitter y Facebook.